Normalmente se trata de carcinoma de células transicionales 75- 90% y pueden afectar a la vejiga, pelvis renal y ureter. La manifestación clínica más frecuente es la hematuria (sangrado por orina). El diagnóstico puede se realiza mediante pruebas de imagen (ecografía, tomografñia computerizada) y endoscopia-biopsia. El tratamiento es quirurgico y dependerá de la localización, afectación de la capa muscular, edad del paciente, etc.
En tracto urinario superior pueden realizarse tratamientos minimamente invasivo o nefroureterectomia radical, dependiendo del caso.
En tumores superficiales (sin invasión de la capa muscular) el tratamiento mas habitual es la reseccion transuretral (asociandose o no a quimioterapia intravesical).
La cistectomia es el tratamiento de elección en los tumores musculo-infiltrantes (abierta, laparoscopica o asistida por robot da Vinci).
En casos con posibilidad de diseminación metástasica utilizaremos protocolos de quiioterapia sistemica.